El iris es un buen aliado a la hora de analizar si la foto ha sido trucada. Ocurre algo similar con una diana: en el centro, el iris se ve perfectamente redondo, pero a medida que se aleja hacia el exterior, comienza a transformarse en una elipse. Si la forma del iris no corresponde con el lugar donde se encuentra, porque es muy elíptica y está en el centro, o viceversa, está manipulada.

Redacción QUO