Cruzar el Atlántico a remo es una peripecia que no está al alcance de cualquiera. Pese a ello, Jesús de la Torre y Jorge Pena, son dos aventureros gallegos que se han propuesto llevar a cabo esta proeza. Ambos se han inscrito a la regata Talisker Whisky Atlantic Challenge 2017/18, una de las más duras competiciones marítimas que existen. En diciembre partirán de la isla de La Gomera y tendrán un plazo de 90 días para cruzar el océano.
Pero, ¿qué lleva a dos personas a plantearse semejante aventura? Una combinación de múltiples factores, aunque Jesús y Jorge lo van a hacer también por una razón solidaria: para dar visibilidad a la Fundación CRIS contra el cáncer.
Ya hay más de 60 botes inscritos a la competición, pero estos dos gallegos forman un equipo que llama la atención por un motivo muy concreto: son los participantes de más edad que tomarán parte en la prueba, ya que Jesús tiene 63 años y Jorge 52.
Prepararse para una aventura como la que van a vivir no es algo sencillo. “Todo el mundo nos dice que para superar el reto un 20 % es el aspecto físico y un 80 % el psicológico”, cuentan. Psicológicamente se sienten con fuerza de sobra y, para estar también a la altura físicamente, llevan ya mucho tiempo sometiéndose a un durísimo entrenamiento.
Jesús, el más mayor de los dos, dedica cada día una hora y media a remar y otra a nadar, además de realizar ejercicios en el gimnasio. Aunque una de sus mayores preocupaciones es no perder demasiado peso, ya que los médicos que le asesoran le han recomendado tener suficientes reservas en el organismo para afrontar la travesía. La rutina de su compañero Jorge es similar y, por lo general, el tiempo de entrenamiento diario de los dos llega a las cuatro horas.
Jesús y Jorge cruzarán el Atlántico en un bote de siete metros de eslora, dos de manga y 250 kilos de peso, y al que han bautizado con el nombre de Remolón ya que es un poco lento. Pese a ello, son optimistas y esperan completar la prueba en 60 días (un mes menos del plazo del que disponen). Para ello seguirán una ruta similar a la que hizo Colón en su primer viaje, y esperan que los vientos alisios sean sus aliados en la travesía.
Vicente Fernández López