Un estudio realizado en 1985, mostró unos resultados según los cuales varias regiones del cerebro femenino se «apagaban» o reducían su actividad durante un orgasmo. Pero, ahora, una nueva investigación realizada por la Universidad de Rutgers ha desmontado dicha teoría, revelando que, lo que realmente sucede es todo lo contrario, que la actividad cerebral aumenta.
Los investigadores monitorizaron los cerebros de un grupo de voluntarios mientras alcanzaban el orgasmo, primero masturbándose y luego teniendo relaciones sexuales con una pareja. Y el resultado fue que la actividad aumentaba prácticamente en todas las regiones del cerebro en el momento de alcanzar el clímax para, luego, volver a decaer.
Pero los autores del estudio realizaron otro interesantes descubrimiento. y fue que entre las zonas que entre las zonas que más se activaban se encontraba el llamado núcleo dorsal del rafe, que juega un papel clave en la liberación de serotonina, lo que tiene un efecto analgésico en el cuerpo, ya que contribuye a aliviar el dolor. Por ese motivo, los investigadores comprobaron que la resistencia femenina al dolor aumentaba hasta un 75% durante el orgasmo.
Vicente Fernández López