Un equipo de arqueólogos japoneses han descubierto en la región peruana de Pacopampa más de cien sepultura, cuya antigüedad ha sido datada en el siglo XIII antes de Cristo. Y lo más llamativo es que la mayoría de los esqueletos desenterrados (que se encuentran extraordinariamente bien preservados) presentan terribles deformaciones en sus cráneos.

Los análisis realizados a los restos revelan que dichas deformidades fueron causadas por heridas de arma blanca. Pero resulta especialmente sorprendente, el hecho de que la mayoría de esas heridas no eran mortales, ya que más bien parecen fruto de largas sesiones de tortura.

Los arqueólogos creen que esas personas (entre las que también hay mujeres y niños) fueron sometidas a algún tipo de sádico ritual, ya que también se han encontrado en la misma restos de altares y de ofrendas animales.

Vicente Fernández López