Hay mucha gente que considera que la ciencia ficción es un género literario menor, y que infravalora a autores como Ray Bradbury o Isaac Asimov. Y a esas personas resulta complicado, por no decir directamente imposible, tratarles de hacer ver la riqueza y la complejidad del conjunto de (por ejemplo) el conjunto de relatos que conforman esa obra magna titulada Crónicas marcianas. Pero, ¿por qué esto es así? Un experimento realizado por especialistas de la Universidad de Washington ha tratado de desentrañar algunas de las causas de este fenómeno.

Los investigadores realizaron un experimento con 150 voluntarios, todos ellos aficionados a la literatura, a los que les hicieron leer dos textos. A la mitad de ellos les entregaron un relato literario ambientado en un entorno realista. Y a la otra mitad les entregaron el mismo relato pero ambientándolo en un entorno de ciencia ficción. Luego, les sometieron a un test para que expresaran sus opiniones sobre la psicología de los personajes, sobre la complejidad del entorno social en el que se movían, o sobre la profundidad de los conflictos humanos y sociales que se planteaban.

Y el resultado fue que los lectores del cuento realista consideraron de forma mayoritariamente que este era rico y complejo en matices y sugerencias. Por el contrario, entre quienes leyeron la versión de ciencia ficción, hubo un alto porcentaje de personas que lo consideraron vacío y superficial.

El resultado llamó la atención de los investigadores, ya que los personajes eran exactamente los mismos, su psicología era idéntica en ambas versiones, y los conflictos también eran calcados. ¿Qué estaba sucediendo entonces? Para intentar aclararlo, los autores del estudio fueron un poco más allá e indagaron en los gustos literarios de los voluntarios.

Y lo que descubrieron fue que quienes tenían prejuicios previos hacia la literatura de ciencia ficción, fueron precisamente quienes menor apreciaron la complejidad del relato. Para los investigadores la conclusión es que quienes desprecian la ciencia ficción como género literario, se esfuerzan mucho menos al leer una historia de este tipo y, por tanto, tienen menos capacidad efectiva de apreciar sus virtudes.

Vicente Fernández López