La costa de Salish, en la Columbia británica, se ha convertido en uno de los lugares más misteriosos de Canadá, a causa de un enigma que todavía nadie ha sabido resolver. Hace dos días, una persona que paseaba por una de sus playa hizo un macabro descubrimiento: una bota en cuyo interior se encontraba un pie humano. Semejante hallazgo ya resulta bastante enigmático de por sí, pero el asunto se convierte en algo realmente inexplicable cuando nos enteramos que este pie sin cuerpo es el decimotercero que aparece en ese lugar desde el año 2007.

Los antecedentes de esta macabra historia se remontan al año 1887, cuando se cuenta que apareció en una playa el primer pie humano. Luego, no volvió a suceder algo similar hasta 1914. Fue en 2007 cuando este misterioso fenómeno resurgió con fuerza. En agosto de ese año se encontró en la playa una zapatilla marca Adidas, en cuyo interior había un calcetín que contenía un pie humano. En este caso, los análisis revelaron que el resto pertenecía a un hombre desaparecido al que le habían diagnosticado depresión.

A partir de entonces los sucesos se encadenan, y hasta la fecha se han encontrado doce pies más, casi todos ellos en el interior de zapatillas deportivas. Las pruebas realizadas a todos esos restos han demostrado, incluso, que dos de ellos correspondían al pie derecho e izquierdo de una misma persona. Pero, ¿de dónde proceden?

Lo cierto es que nadie lo sabe con seguridad. Se ha apuntado a un asesino en serie, pero el análisis de los forenses no ha encontrado indicios de que los pies fueran cortados intencionadamente. Por ese motivo, la hipótesis que cobra más fuerza es que se trate (en la mayoría de los casos, aunque no en todos) de restos pertenecientes a personas fallecidas en el tsunami que asoló Indonesia en el año 2004, y que habrían sido arrastrados por la corriente. Esta teoría se basa en el hecho de que el estudio de las zapatillas y botas que contenían dichos restos eran modelos que habían sido distribuidos y vendidos en Asia.

Pero, ¿por qué solo aparecen los pies y no el resto de los cuerpos? Según los forenses, tanto los pies como las manos se desprenden con bastante facilidad del resto del cuerpo durante el proceso de descomposición, y esto podría haberse acelerado por causa del agua del mar. Lo habitual sería que dichos restos humanos se quedasen en el fondo, pero los pies, al encontrarse dentro de una zapatilla pudieron flotar hasta la superficie siendo arrastrados por la corriente.

La explicación parece plausible aunque, por el momento, nadie ha podido confirmarla. De momento, lo único que sabemos con certeza es que ya ha aparecido el pie número trece de esta macabra historia. Y, en esta ocasión, también llevaba consigo una parte de la pierna.

Vicente Fernández López