En 1984, fueron descubiertos cerca de Cape Cod, en la costa de Massachusetts, los restos del Whydah, el barco de Sam Bellamy, considerado el pirata más rico de todos los tiempos. Pero, ha sido ahora, cuando un equipo de investigadores de la Universidad de New Haven ha realizado unas pruebas para comparar muestras de ADN de los restos humansos encontrados en el lugar del naufragio, con las de varios descendientes del célebre filibustero. Los resultados se presentarán oficialmente el domingo pero, según se ha filtrado, parece ser que han sido positivos y han permitido identificar los restos del pirata.

Nacido en 1689, en Inglaterra, Sam Bellamy, apodado también Black Sam, tiene una historia cargada de romanticismo, aunque hay que tener en cuenta que cuando se trata de este tipo de personajes, es difícil separar dónde acaba la realidad y dónde comienza la leyenda. Según se cuenta, tras emigrar a Norteamérica, conoció a una mujer llamada María Hallet, de la que se enamoró apasionadamente. Tratando de mejorar su posición, se hizo a la mar para hacerse rico rescatando cargamentos de buques hundidos. Pero la fortuna no le sonrió, y acabó enrolado en un barco pirata.

Tras un motín, Bellamy acabó convertido en capitán de la nave e inició una prolífica carrera que le llevó a hacerse rico. Se dice que antes de cumplir los 29 años, ya había logrado apresar cincuenta naves, y que logró reunir un botín que, actualmente, equivaldría a unos 130 millones de dólares.

En 1717, considerando que ya era suficientemente rico, decidió abandonar la piratería y volver a Cape Cod para disfrutar de la vida junto a su amada (con la que ya se había casado y con quien tenía varios hijos). Pero en el viaje de regreso, una tormenta hundió el barco acabando con la vida de Bellamy y de casi toda su tripulación, formada por más de cien hombres.

Parte de su botín fue recuerado cuando se descubrieron los restos del naufragio, aunque se sospecha que la mayor parte ya había sido «rescatada» por saqueadores marinos y cazatesoros. Y el próximo domingo sabremos, por fin, si los restos del famoso pirata han sido finalmente identificados.

Vicente Fernández López