«¿Qué le debemos a los romanos?», preguntaba un personaje de la Vida de Biran. La respuesta podría ser muy amplia: los acueductos, las calzadas, los fundamentos del derecho… Pero también la expansión de algunas graves enfermedades. Y es que un nuevo estudio realizado por la University of Wisconsin-Madison, revela que los romanos fueron los responsables de la expansión de la tuberculosis por todo el mundo conocido en su época.
Los investigadores han analizado el genoma de varias cepas de la tuberculosis, y ellos les ha permitido saber la enfermedad se originó en África hace decenas de miles de años. Y, hace aproximadamente unos 6.000 años, la cepa originaria dió origen a varios linajes. Muchos no prosperaron, pero otros llegaron a expandirse fuera del continente africano.
Y esa expansión coincide con el momento en el que los romanos comenzaron a explorar todo el Mediterráneo y pusieron en contacto a pueblos que hasta entonces habían permanecido aislados unos de otros. Según los investigadores, gracias a que el virus de la tuberculosis puede pasar años latente en el organismo de una persona sin mostrar síntomas, los romanos que se convirtieron en portadores del mismo lo fueron extendiendo por todo el mundo. Y las guarniciones militares y los baños y anfiteatros que el imperio construyó a su paso, se convirtieron en focos que facilitaron la expansión de la enfermedad.
Fuente: ScienceAlert.
Vicente Fernández López