Estados Unidos finalmente va a deportar a Alemania a Jakiw Palij, de 95 años, acusado de crímenes de guerra durante la II Guerra Mundial. Desde 1942, Jakiw, miembro de las SS, sirvió como guardia en el campo de exterminio de Trawniki, situado en la parte de Polonia ocupada por los nazis.

Hace 70 años, Jakiw emigró a Estados Unidos, con una identidad falsa, y haciéndose pasar por un campesino polaco. Pero la verdad fue descubierta en 1998. Estados Unidos le retiró la nacionalidad y quiso deportarlo a Alemania, pero se entabló una peculiar batalla legal sobre quien debía juzgarle. El gobierno germano rechazó la extradición alegando que los crímenes se habían cometido en suelo polaco. Y Polonia, a su vez, se hizo a un lado, esgrimiendo que la responsabilidad legal de lo ocurrido era cosa de los tribunales alemanes.

Jakiw ha pasado estos veinte años viviendo en su casa de Queens, en Nueva York, con su esposa María. Frente a su domicilio han sido frecuentes las manifestaicones de miembros de la comunidad judía protestando contra su presencia. Pero, ahora, el gobierno alemán ha decidido aceptar la extradición, y el criminal nazi ha sido enviado finalmente a Berlín, donde será juzgado.

Fuente: The Guardian.

Vicente Fernández López