Rockstar Games apuesta con L.A. Noire por una aventura del ambiente policíaco de Los Ángeles en 1947; y huele a películas como L.A. Confidential y El halcón maltés. Cole Phelps, un veterano de la II Guerra Mundial metido a policía, tendrá que resolver varios crímenes. Más de 180.000 fotografías y asesinatos reales de la época han servido a los creadores para retratar una ciudad que, pese a tener una fachada tan resplandeciente y glamourosa como la del Hollywood de entonces, oculta corrupción, crimen y violencia.

El jugador tendrá que hablar con confidentes, interrogar a sospechosos e interpretar sus emociones. La acción también está muy conseguida y, además de una libreta para anotar las pistas, el jugador también tendrá que conducir, y utilizar su arma y sus puños para seguir su investigación.

L.A. Noire no tiene una única forma de resolver los casos, sino que puede seguir diferentes pistas y, de hecho, el jugador casi nunca llega a descubrirlas todas. Y como guinda, una banda sonora de jazz con clásicos de Ella Fitzgerald y Duke Ellington ayuda a la inmersión total en el ambiente.

L.A. Noire

Rockstar Games apuesta con L.A. Noire por una aventura del ambiente policíaco de Los Ángeles en 1947; y huele a películas como L.A. Confidential y El halcón maltés.

Un tipo duro

El protagonista, Cole Phelps, trata de resolver crímenes basados en hechos reales.

Muchas posibilidades

L.A. Noire no tiene una única forma de resolver los casos, sino que puede seguir diferentes pistas y, de hecho, el jugador casi nunca llega a descubrirlas todas.

Creer o no al testigo

El triunfo del protagonista depende de interpretar bien los gestos y caras de los interrogados. Para lograr realismo, han capturado los gestos faciales de los actores con tecnología MotionScan, que utiliza 32 cámaras de alta definición para rodear al intérprete y registrar su imagen en 3D. Y han usado más de 400 actuaciones reales para recrear cada mueca, guiño o sonrisa y su significado.

 

Foto: Aaron Staton, de Mad Men, digitalizado para el juego.