Le dedican libros monográficos, los mejores chefs hacen su propia versión y ya tiene hasta un día internacional dedicado a ella (el 16 de enero). Cuenta Laura Conde en su libro La felicidad en una croqueta (Ed. Now Books) que el origen de este alimento no es español, sino francés, y que la primera de la que se tiene constancia histórica fue realizada por el cocinero de Luis XIV y estaba elaborada con trufa, molleja de ave y crema de queso. Algo más en la línea de la nueva moda de hacer croquetas gourmet que de las más populares, a base de las sobras del cocido.
En la última edición de Madrid Fusion hemos visto incluso una competición para hacerse con el título de la mejor de jamón de Jabugo, y el gusto por este manjar ha hecho que proliferen restaurantes en torno a ellas, como la Gastrocroquetería de Chema en Madrid y Casa Alfonso en Barcelona. ¿Lo último? Usar pan rallado japonés, panko, para el rebozado y comerlas hasta de gin tonic en la sobremesa.
Otra de las últimas modas foodies pasa por poner una sal especial a cada comida. Estas son algunas de las más sabrosas.
1.- De escamas con azafrán. Precio: 6,25 € (lachinata.es)
2.- Roja de hawái. Para barbacoas. Precio: 6,40 € (lachinata.es)
3.- De flor de sal, de salinas de ibiza. Para ensaladas y carpaccio. 6,50 € (salineraespanola.com)
4.- Del mediterráneo Jamie Oliver. Precio: 5,60 €
5.- Del himalaya ‘barbacoa’. Ideal para carne a la plancha.
Precio: 3,60 € (lachinata.es)
6.- Flor de sal rosada. Pimienta rosa y pimentón ahumado. Precio: 6,50 € (salineraespanola.com)
7.- Flor de sal con mandarina y especias. Para sopas y asados. Precio: 9 € (sosofactory.com)
8.- Mediterránea con hierbas d’es trenc. Precio: 9,90 €
El Vita Juicer de Novis es mucho más que un exprimidor. Pensado para sacar la máxima esencia de la fruta, su última tecnología no solo extrae el zumo, sino que, además, lo comprime y lo mezcla. Y todo ello, adaptando la velocidad y la presión al producto con el que estemos trabajando. El resultado es ideal para postres y cualquier tipo de cócteles.
Precio: 398 €
Cherry Merlot, Chocolate Cabernet y Red Raspeberry Chardonnay. Los llaman winescreams (de Wine Ice Cream) y son una idea de la empresa estadounidense Mercers. Se trata de mezclar el sabor y las características de algunas de las variedades de uva más populares con la cremosidad del helado para llegar a todos los públicos aunque conservan un 5% de graduación alcohólica.
Para cocer la pasta, escaldar verdura e incluso descongelar de forma natural. El uso del agua hirviendo en la cocina es tan habitual que contar con un grifo que la tenga siempre lista es todo un hallazgo. Por eso, hay cada vez más fabricantes que los incluyen en sus catálogos. Entre otros, la línea Red® de Grohe y el Fusion de la belga Quooker (en la foto).