Reír libera endorfinas en el cerebro, nos hace estar más eufóricos y ayuda a superar inhibiciones. La risa, en definitiva, es un gesto imprescindible en el cortejo amoroso, según un estudio liderado por Alan Gray, del Colegio Universitario de Londres.
Los investigadores separaron a 112 estudiantes en cuatro grupos. A unos se les proyectó una comedia; a otros, un documental de naturaleza; a otros, un largometraje, y a un cuarto grupo un vídeo para aprender a jugar al golf. Previamente se les advirtió que debían mantener silencio y no conversar entre ellos durante la proyección. Solo podían reír. Los autores de este estudio fueron anotando con qué frecuencia reían los espectadores en cada grupo.
Terminada la sesión, se les preguntó por su estado emocional. Cada voluntario pasaría a uno de sus compañeros un mensaje escrito que describiese cómo se encontraba después de la proyección. Al evaluar los resultados, los investigadores comprobaron que los estudiantes que acababan de ver una película cómica, y por tanto habían reído más, escribieron sus notas con más detalles acerca de sus intimidades.
La risa nos hace sentir más cercanos y transmite confianza, cordialidad y seducción. Inevitablemente, invita a una respuesta similar. Lo comprobó también Eric Bressler, investigador de la Universidad McMaster, en Canadá: el 62% de las mujeres eligen como pareja a un hombre que le hace reír. El 65% de los hombres escoge a una mujer que valora su sentido del humor.