GIOTTO DI BONDONE (1267?-1337)

Nacido en Colle di Vespignano, en plena Toscana, tuvo gran éxito como re­tratista, e incluso fue nombrado arquitecto jefe de Florencia.

La supernova de la época

Los astrónomos antiguos vieron novas y supernovas (cataclismos de estrellas moribundas). Los chinos mencionan una en el invierno de 5 a. C. Kepler, que vio la nova de 1604, dio la idea de que la de Belén fuera una.

Los padres romanos

El arte romano (arriba, un fresco de Pompeya) influyó en los retratos realistas de Giotto. Los personajes de la Adoración tienen sus características y personalidad. Hasta los camellos tienen ojos azules, para indicar su procedencia extranjera.

Superar a Cimabue

El maestro de Giotto era Cimabue, el pintor más importante de la generación anterior. Pero Giotto superó los dorados góticos y las figuras estáticas e iguales con escenas tridimensionales y retratos emotivos.

Una predicción astrológica

La disposición estelar servía a sectas como la de los Magoi (¿origen del nombre?) para predecir el nacimiento de un rey. Los Magos solo aparecen en el Evangelio de Mateo, pero enseguida fue tradición, como se ve en este mosaico bizantino (siglo V).

Cometa Halley

Se registró por vez primera en 239 a. C. El cálculo lo coloca en el año 9 del nacimiento de Cristo. Y es posible que Giotto lo viera en 1301 y que, tres años más tarde, lo reprodujera en el fresco.

Pago por entrar al cielo

Dante colocó a Riginaldo Scrovegni, famoso usurero, en el séptimo círculo del infierno. Su hijo, Enrico, también prestamista, encargó la capilla para purgar pecados, entrar en el cielo, reconciliarse con la Iglesia y ser bien visto socialmente. Se hizo retratar en ella ofreciéndola a Dios.

Lluvia o conjunción de astros

En el año 7 a. C. se produjeron varias conjunciones: una entre Venus y Júpiter muy cerca del Sol, y otras tres entre Júpiter y Saturno. También pudo ser una estrella fugaz de las grandes, las llamadas bólidos, que tienen estela, o una lluvia intensa de materia espacial.

Un monumento funerario

Giotto reprodujo en la Capilla de los Scrovegni escenas de la vida de la Virgen y Jesucristo, los Vicios y las Virtudes, y el Juicio Final. Los frescos ya restaurados (el azul es especial) requieren una capa, o arriccio, de yeso, y sobre ella, an­tes de secarse, se dibuja y colorea.