Si tuviéramos que juntar a todos los que visitáis habitualmente Quo.es, según los últimos datos de medición de Comscore este mes, necesitaríamos llenar el Nou Camp, el Bernabéu y el Calderón… ¡2,5 veces! Un día molaría hacer una quedada. Pero se antoja dificilillo.

Aprovecho, pues, que estáis mirando esta página para comunicaros que QUO ha evolucionado y para pediros ayuda. Necesitamos que nos digáis qué os parece. Que nos contéis vuestra opinión sobre la nueva apuesta digital y en papel que inauguramos hoy. Vamos, que nos critiquéis (para bien o para mal, que de todo se aprende). Aunque, os soy sincero, a nosotros los elogios no nos van a debilitar.

En esta página vas a encontrar el modo de participar en nuestro Club de lectores, un grupo de amigos al que vamos a pedir su opinión. No hay límites, condiciones, ni derecho de admisión. Los que os apuntéis, además de poder ayudarnos a mejorar la revista, optaréis a unos cuantos buenos regalos (drones, cámaras de fotos, un bautismo de vuelo, viajes y suscripciones a la revista). ¿Os atrevéis?

Confieso que cuando me llamaron para dirigir esta revista (hace más de 11 años), era un saco de nervios. Me vine a trabajar a la empresa más innovadora y creativa del sector editorial (por aquel entonces nos llamábamos Hachette Filipacchi), al frente de la revista que había sacudido el estable sector de la divulgación. En aquella época no había whatsapp, así que mandé un viejuno SMS a un buen amigo, director de la sección de ciencia de un diario nacional. Era una especie de “¡qué hago!” telefónico. Sus palabras se convirtieron en casi un claim: “Ya hay muchs revistas q hablan del Universo. Pero pocas lo hacen d mi univ.”

Unos años después, cuando nuestra empresa pasó a formar parte del gigante Hearst, la directora editorial de Hearst Magazines International me llamó para que le explicara QUO. Eché mano del eslogan de mi amigo y quedé como un rey. Porque QUO lleva 22 años descubriendo no solo como funciona el cosmos, sino adentrándose en las quisicosas de “nuestro” cosmos; de lo que más nos afecta, preocupa, duele, entusiasma, da placer en el dulce día a día del siglo XXI.

Durante este tiempo nos han pasado algunas cosas. Hemos visto nacer un nuevo modo de contar las cosas a través del universo digital. (Sí, ya tenemos whatsapp). Recuerdo a un joven y brillante bloguero vaticinando en uno de los primeros congresos de periodismo digital que organizamos el inminente final de la prensa de papel. No hace mucho vino a ofrecerme un artículo para le revista impresa. Se lo publiqué, por supuesto. Era muy bueno.

Hemos pasado la peor crisis de la historia de los medios (de esas de las que solo se sale si cuentas con el apoyo de tantos cientos de miles de lectores como nos habéis seguido sin descanso), y nos ha hecho mejorar. Y hemos cometido unos cuantos errores que ya os contaré cuando quedemos en el Nou Camp, el Bernabéu o el Calderón.

Pero no hemos dejado de cambiar. Nunca hemos pensado que teníamos la fórmula definitiva de nada.

Ahora tenemos el gusto de presentaros la última evolución. ¿Os confieso algo?: Es la que más me ilusiona. Sobre estas líneas tienes una galería donde podrás ojear parte de nuestra nueva propuesta. Verás una revista más ágil, diseñada al aire de las tendencias más modernas en el negocio editorial, con un contenido tan cuidado como siempre pero gráficamente más potente. Con espacio para la sorpresa y para el reposo en la lectura. Con un entorno premium para nuestros queridos anunciantes. Pero con la misma obsesión de siempre. Despertar la curiosidad por “tu universo”.

Aunque todo esto no es más que una opinión… nos falta la tuya. ¡Gracias!