Preparar la EvAU no solo significa estudiar. El cerebro ha de estar despejado y con la energía necesaria para afrontar una prueba de máxima exigencia. Lo que desayunes, puede ser crucial

Hay numerosos estudios que relaciona la alimentación con el rendimiento del cerebro ante un examen de máximo estrés como la EvAU, uno de ellos se centró expresamente en los efectos del desayuno en el rendimiento académico.

Según el estudio sobre los efectos del desayuno en el rendimiento académico, necesitas energía para que los engranajes del cerebro estén en su punto óptimo, y esa energía debes tomarla en el desayuno.

El período de ayuno nocturno más prolongado, puede agotar las reservas de glucógeno durante la noche. Para mantener esta tasa metabólica más alta, se necesita un suministro continuo de energía derivada de la glucosa, por lo que el desayuno puede ser vital para proporcionar la energía adecuada para enfrentar un examen tipo maratón.

A esa hora es necesario la elaboración de un desayuno que nos aporte hidratos de carbono complejos, proteínas y grasas de buena calidad. Un ejemplo pueden ser unas tostadas de pan integral con aguacate y un alimento rico en proteínas como el salmón, el huevo, la pechuga de pavo o el queso fresco.

Evita desayunar y comer dulces antes de la pruebas. Notarás un pico de glucosa que caerá en medio del examen dejándote sin energía. Por supuesto, no es el momento de las barritas energéticas ni de aquello que utilizas para el deporte. Para una prueba así, necesitas energía de larga duración.

Para mantener la concentración durante un examen tan largo

Hay alimentos que pueden ayudarte a tener una buena concentración durante esa jornada como el aguacate, las nueces o el chocolate negro (70 por ciento cacao)

Las vitaminas del grupo B son las que más se asocian al buen funcionamiento del cerebro. LaB1 o tiamina, cuando escasea, produce irritabilidad y nerviosismo, y problemas de memoria y concentración. Los alimentos que más la aportan son los frutos secos, los cereales integrales, carnes y pescados.

La B6 o piridoxina también, si falta, produce nerviosismo y algo que no queremos en absoluto el día de un examen: fatiga. El pescado, el queso curado y el germen de trigo aportan esta vitamina fundamental para no venirte abajo.

Qué evitar

Aleja las bebidas energéticas, el té y el café, que ayudan a ponerte más nervioso. También aparta lo más lejos que puedas la bollería, las galletas y los zumos porque aunque sean un aporte de hidratos de carbono simples, al no tener nada de fibra se van a digerir muy pronto, por lo que la sensación de hambre y decaimiento va a aparecer de forma repentina y brusca mientras estás haciendo el examen

También debes intentar comer de forma saludable. Un estudio realizado por la Universidad de Alberta descubrió que las dietas más saludables estaban relacionadas con mejores puntajes en las pruebas y calificaciones más altas .

Los buenos alimentos para el cerebro para comer antes de una prueba incluyen los siguientes:

  • Granos integrales como la avena y la quinoa
  • Fruta fresca (plátanos, manzanas, peras, etc.)
  • Verduras frescas (brócoli, apio, zanahorias, etc.)

Incluso si estás nervioso por el examen, ¡no te saltes el desayuno! Lo más probable es que te sientas peor y con mucha menos energía si no comes nada en absoluto. Y, ¡suerte!