Los humanos modernos y los neandertales compartieron Eurasia durante varias decenas de miles de años. Pero no tuvieron descendencia juntos durante todo ese tiempo

Hace unos 60.000 años, los neandertales tuvieron unos nuevos e inusuales vecinos: el Homo sapiens había llegado a la masa continental euroasiática procedente de África. Con el tiempo, los dos grupos humanos tuvieron descendencia conjunta en repetidas ocasiones. En un estudio reciente, los expertos han analizado cuándo se produjo exactamente esta mezcla genética y cuánto duró el encuentro. Resultó que la fase en la que los humanos modernos y los neandertales tuvieron hijos juntos comenzó más tarde de lo esperado y duró relativamente poco tiempo. Los científicos calcularon una ventana temporal de unos 7.000 años.

Este fue el resultado del análisis de cientos de muestras de ADN. Leonardo Iasi, genetista evolutivo del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig, y sus colegas analizaron el ADN de 58 individuos que vivieron hace entre 2.200 y 45.000 años y lo compararon con el de 231 personas de la actualidad. Los datos proporcionan pistas sobre cuándo aparecieron ciertas secuencias de ADN neandertal en el genoma del Homo sapiens, si se conservaron o, en caso afirmativo, cuándo volvieron a desaparecer.

Todos somos un poco neandertales

En principio, el estudio confirma lo que se sabía desde hace tiempo: los acontecimientos del Paleolítico en Eurasia han dejado huellas genéticas hasta la época moderna. En la actualidad, todos los seres humanos, salvo los de ascendencia puramente africana, portan una proporción significativa de ADN neandertal, en torno al uno o dos por ciento. Quedan excluidas las personas cuyos antepasados procedían del África subsahariana, ya que sus ancestros nunca entraron en contacto con los neandertales.

La comparación a gran escala de cientos de genomas antiguos y modernos demostró que la afluencia de genes neandertales se limitó a una única ráfaga que comenzó hace unos 47.000 años y duró unos 6.800 años. Al final de esa fase, los neandertales ya estaban al borde de la extinción.

Sin embargo, el Homo sapiens y el Homo neanderthalensis siguieron caminos separados durante esos siete milenios. La transferencia genética se limitó a episodios individuales. Al menos para los humanos modernos, el material genético de sus vecinos no parece haber sido especialmente beneficioso, como descubrieron los investigadores. Muchas secuencias de ADN adoptadas fueron eliminadas del genoma del Homo sapiens a lo largo del tiempo con notable rapidez mediante procesos evolutivos.

Los desiertos de ADN neandertal

Como resultado, los genomas humanos actuales contienen extensos «desiertos» completamente libres de ADN neandertal. El equipo de investigadores halló estas zonas despejadas en genomas antiguos de las últimas fases de la interacción entre humanos y neandertales, lo que significa que el proceso de eliminación comenzó muy pronto. Según Emilia Huerta-Sánchez, bióloga evolutiva de la Universidad Brown de Providence (Rhode Island), esto indica que muchas secuencias neandertales eran desfavorables para los humanos y, por tanto, fueron rápidamente seleccionadas por la evolución.

Para Huerta-Sánchez, este trabajo llena algunas lagunas de conocimiento clave en la historia de los primeros humanos porque revela más sobre el momento de las interacciones y las fuerzas evolutivas que actuaron sobre el ADN neandertal en poblaciones humanas anatómicamente modernas, gracias a la inclusión de genomas paleolíticos.

Sin embargo, siguen existiendo algunas lagunas en nuestros conocimientos. Por ejemplo, se sabe mucho menos de la historia genética de los humanos de Oceanía y Asia oriental que de los de Europa, en parte porque hay pocos datos de genes reconstruidos de esta región. La razón por la que los humanos modernos de esta región han conservado proporciones algo mayores de ADN neandertal -alrededor de un 20% más que sus vecinos europeos- sigue siendo una de las cuestiones sin resolver.

REFERENCIA

Neandertal ancestry through time: Insights from genomes of ancient and present-day humans

Fuente: Nature

Foto: OLIVER BERG / DPA / PICTURE ALLIANCE