Es uno de esos coches de capricho que se compran más con el corazón que con la cabeza. Ahora, para los más elitistas, la marca anuncia que a final de año se pondrá a la venta una versión muy especial bajo el nombre Abarth. Es esta una denominación utilizada por la marca italiana que intenta transmitir los valores del mundo de la competición a los vehículos de calle. En esta ocasión, el 500 Abarth se distingue del resto de la gama por tener un parachoques específico, un alerón encima de la puerta, doble salida de escape, llantas de 16 y 17 pulgadas, interiores de competición… Y, lo que es más impactante, un motor de 200 caballos en la versión tope de gama.

Marta García Fernández