Este dron no es un juguete. Por mucho que sea capaz de transformarse en un dragón que parece flotar a través del aire, no lo hace para divertir a la gente, sino que se trata de un nuevo dispositivo adaptado para interiores. Los obstáculos que un dron genérico puede encontrarse cuando entra en una casa son marcos de puertas, ventanas, lámparas y diferentes muebles que están tan juntos entre sí que en cualquier momento puede acabar estrellándose contra ellos.
Para evitar estos problemas, la Universidad de Tokio está trabajando en un dron que es capaz de cambiar desde su disposición en cuadro habitual a otras más espectaculares como un dragón, serpiente o caballito de mar. Cada uno de los que han visto este vídeo de sus creadores ha imaginado un animal diferente cuando toma vuelo. Este tipo de drones están pensados para actuar en situaciones de emergencia, cuando sea necesario moverse por escenarios en los que el acceso humano es difícil, pero es posible enviar un robot volador de estas características y que se adapta a casas derruidas o huecos impensables.
Es increíble ver cómo este dron, al que han llamado DRAGON, es capaz de transformarse de tantas maneras diferentes gracias a sus 12 módulos vinculados entre sí… ¡y en pleno vuelo! Incluso podemos ver en el vídeo cómo puede saltar obstáculos con una agilidad pasmosa (a su ritmo, pero de forma ligera).
El objetivo del equipo es poder llegar a crear un androide que sea capaz de volar y transformarse en el aire como lo hace este pequeño dron. Así que podemos decir que es un germen de un futuro “transformer” de los que hemos visto en el cine.
Alberto Pascual García