Correo electrónico, televisión, cámara de fotos, teclado, consola de videojuegos, acelerómetro, navegador y reproductor de música, entre otras cosas.
Y todo esto en los 11,5 x 6,1 x 1,2 centímetros y 133 gramos de peso del iPhone 3G. En 1973, el primer teléfono móvil de la historia (Motorola Dynatac) pesaba 780 gramos y medía 33 x 9 x 4,5 centímetros.
Y solo era capaz de hacer llamadas telefónicas. Todo lo que lleva el hombre de la imagen sobre sus hombros no ocupa ni una octava parte de las funciones que tiene un móvil actual.
En el más básico de los iPhone caben hasta 60.000 fotos (nuestro amigo sólo tiene una) y 129 aplicaciones que permiten desde ver qué tiempo hace hasta rellenar hojas de cálculo.
Además, gracias al acceso a internet y sus conexiones inalámbricas podemos leer cualquier periódico, jugar y compartir archivos al instante, y con personas en cualquier parte del mundo.
¡Qué peso (tecnológico) nos hemos quitado de encima!
Redacción QUO