Anillo del pánico

Basta presionar un botón oculto en esta joya durante tres segundos para que tu círculo más cercano reciba tu localización GPS. Un simple gesto que no hará sospechar a tu atacante y que te permitirá contactar con la Policía si la situación se presta a ello.

El anillo Nimb es uno de los últimos complementos incorporados a la lista de accesorios de seguridad smart del mercado: otras empresas como invisaWear o Safelet ofrecen toda una línea de colgantes, brazaletes o incluso llaveros que pasan desapercibidos, pero que podrían salvarte la vida.

España es uno de los países con menos delincuencia en la calle, un cuarenta por ciento menos que en 2008, aunque seguro que muchas personas estarían dispuestas a usarlo.

La alerta anti rayos UV, en tu uña

Parecerá un complemento de manicura, diminuto y azul, pero puede salvarte la vida. El dispositivo UV Sense es un miniordenador capaz de detectar la cantidad de rayos solares dañiños a la que te expones. Va registrando y almacenando esas exposiciones hasta tres meses y las traslada de forma inalámbrica a una aplicación móvil, desarrollada también por La Roche-Posay, del grupo L’Oréal.

A partir de esos datos, la aplicación calcula el riesgo que corres y te avisa cuando tu piel necesita ir buscando la sombra. El wearable, diseñado por Yves Béhar, se pondrá a la venta en EE. UU. el próximo verano y en el resto del mundo en 2019.

Volar a chorros

Las piruetas a saltos sobre el agua han dejado de ser cosa de los delfines. No hay más que ver a esta (¿este?) artista del flyboard demostrar su pericia en el club náutico Dubai Marina. Su exhibición formaba parte del programa de ocio de la Feria del Yate 2017, celebrada en la capital de los Emiratos Árabes Unidos. Y la instantánea, captada por el indio Riyas Muhammed, opta ahora a uno de los Sony World Photography Awards, que se fallan el 27 de marzo.

La modalidad flyboard surgió cuando al francés Franky Zapata se le ocurrió en 2012 conectar una manguera de 20 metros al chorro de escape de una moto de agua y dirigirla a toda potencia hacia una tabla con dos salidas. El líquido a presión eleva a la persona erguida sobre la tabla, que puede graduarlo para ascender, caer de cabeza e incluso sumergirse a gran velocidad.

Redacción QUO