Según el informe World Robotics 2008, ya hay un millón de robots industriales, y la cifra se duplicará en 2015. Las ventajas sobre la productividad son claras. Basta comparar las cifras de las compañías automovilísticas japonesas (muy robotizadas), que fabricaron doce millones de coches anuales con solo 600.000 trabajadores humanos.
Mientras que sus colegas americanas necesitaron 2,5 millones de obreros para alcanzar la misma cifra. Ante tales datos, algunos analistas alertan del impacto que esto tendrá sobre el paro.
Así, el ingeniero electrónico Marshall Brain afirma en Nation robotic que: “Para 2015 se perderán en EEUU diez millones de empleos en los departamentos de atención al público por la introducción de operadores mecánicos”.
Redacción QUO