Conseguir que salgan las cuentas en la caja del súper, a veces ya es difícil. Pero aún tendremos que hacer más virguerías si, como ha sugerido el Consejo Europeo de Información sobre Alimentación (EUFIC), los tickets incorporan la información calórica de la compra. Según este órgano, el aporte calórico es la información que más interés suscita al consumidor y a la que más rápidamente llega. Uno de sus estudios reveló que le trae sin cuidado si se habla de un aditivo o un nutriente, pero ha aprendido si su compra corre el riesgo de provocar
un infarto.
Redacción QUO