Desapareció en África y vuelve a África. El último caso de viruela se registró en Somalia en 1977 y ahora aparecen nuevos casos en el Congo. La OMS ha contabilizado 760 personas infectadas de un virus procedente del simio que ha saltado a los humanos. La pregunta que surge de forma inmediata es: ¿cómo es posible que una enfermedad que se había erradicado aparezca de nuevo? Vicente Estrada, especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, explica la clave: «La vacuna que se utilizaba protegía frente a virus parecidos al humano, como el del simio, pero con el tiempo hemos visto que cuando se dejó de vacunar no se consiguió erradicar el virus de la mono»
Hasta 1986 la OMS hizo una campaña de seguimiento del virus en el Congo y en otros países de África y llegó a la conclusión de que era «muy improbable» que la viruela del simio ocasionase un problema de salud pública. El primer paso para que esto se produjera ya se ha dado: el virus ha infectado a humanos. Sin embargo, los especialistas creen que de momento no está justificada la alarma. «Hasta ahora no representa un problema grave porque los síntomas de la viruela del simio son leves y tiene una mortalidad muy baja», puntualiza Vicente Estrada.
La OMS considera la enfermedad controlada porque no hay evidencia de que se transmita entre personas. Según el doctor Estrada, «hay algo en la estructura del virus que dificulta que se transmita entre humanos, a diferencia de lo que ocurre, por ejemplo, con el virus de la gripe común» ¿Y si se confirmara que ha habido contagios de persona a persona? El escenario sería otro muy distinto. Entonces sí podría registrarse una crisis de salud pública. En este salto el virus podría mutar, adquirir virulencia, y convertir una enfermedad, hasta ahora leve, en mucho más mortífera.
La infección podría además volver a Europa a través del tráfico ilegal de animales y de la carne de estos. En 2003 ya se detectó en EE UU una variante del virus que saltó el Atlántico en los perritos de las praderas vendidos como mascotas. Noventa personas resultaron infectadas, y el virus resultó ser poco virulento: sólo entre el 1% y el 10% de los casos resultó mortal. Como está ocurriendo ahora en el Congo, los más afectados entonces fueron los jóvenes que no fueron vacunados en su día por haber sido erradicada ya la enfermedad. Si esta llegara a Europa la infección se cebaría con los menores de 30 años, aunque de momento la viruela no es una amenaza.
Redacción QUO