La mayoría de vosotros conocéis al cruel y despiadado doctor Hannibal Lecter, el villano de El silencio de los corderos. Si por algo destacaba este psiquiatra sociópata, es por su crueldad premeditada a la hora de planear cómo se comería a sus víctimas y su maestría al ejecutar su malvado plan. Algo que tiene en común con la ydriphis Platurus Xanthos, una serpiente marina descubierta recientemente en Costa Rica.
La serpiente ha llamado la atención de los científicos por su peculiar forma de cazar. Según describen Gary Galbreath de la Universidad del Noroeste y Brooke Bessesen del zoológico de Phoenix en un artículo publicado en la revista especializada ZooKeys, este tipo de ofidios acuáticos tienen habilidades ninja. Consiguen colgarse boca abajo de diversas superficies, adaptando una forma que recuerda al de una espiral ¿La intención? Poder abalanzarse con premeditación y alevosía sobre su víctima con efecto sorpresa, ya que los pobres peces ni se han percatado de su presencia.
[image id=»91266″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]La serpiente acuática, que luce un color amarillo intenso, es oriunda de las cálidas aguas de Golfo Dulce (a pesar de su predilección por aguas frías), un pequeño golfo y fiordo tropical situado en la costa meridional de Costa Rica, donde la temperatura del agua del Pacífico alcanza los 32,7 grados Celsius, que es más o menos lo máximo que pueden aguantar los ofidios. A pesar del reciente descubrimiento de la especie, los investigadores han alertado que está en peligro de extinción. Su población se limita a un área desprotegida de 320 kilómetros cuadrados (con 154 especímenes) y actualmente se encuentra amenazada a consecuencia de los coleccionistas y el cambio climático.
Los investigadores creen que están ante una nueva serpiente acuática, pero por el momento han debido de conformarse con la categoría de subespecie.
Por cierto, ¿sabías que Anthony Hopkins se inspiró en una serpiente para desarrollar la personalidad y movimientos de su personaje de Hannibal Lecter?
Redacción QUO