Él solo quería atender una alta demanda de turistas en su zona durante la época estival, pero la inspección de trabajo francesa considera lo contrario. Asegura que se aprovechó del tirón y no respetó la ley impuesta a los panaderos del departamento francés de Aube de que deben descansar al menos un día de la semana.
Cédric Vaivre, de 41 años, es el único panadero de la localidad de Lusigny-sur-Barse, en el noroeste de Francia, y el verano pasado decidió saltarse la ley para poder atender a los miles de turistas que visitan los lagos que se encuentran en un cercano Parque Regional protegido. Pero el resto de panaderos de otras localidades, sabiendo que estaba cometiendo un delito, le denunciaron y ahora debe hacer frente a 3.000 euros de multa que le exige el gobierno local.
Todos los ciudadanos de su pueblo, incluido el alcalde, están con él y le apoyan, porque consideran que es desfavorable que en verano haya comercios cerrados, más cuando hay turistas. De hecho, han decidido lanzar una petición en la web para que los panaderos puedan tener derecho a abrir toda la semana en verano, siempre y cuando puedan. De momento cuenta con más de 2.500 apoyos y esperan alcanzar en los próximos días los 5.000.
Por ahora, lo único que pueden hacer es esperar. El alcalde de la localidad piensa hablar con el oficial que ha impuesto la multa, con la intención de que se la puedan retirar, pero tiene pinta de que no será posible, porque el resto de panaderos insisten en descansar al menos una jornada. Así que si alguien se acerca a esa zona, que compruebe cuál es el día que cierra la panadería, no vaya a ser que queráis unos bocatas…
Fuente: BBC
Alberto Pascual García