Las autoridades de Indianápolis han detectado que muchas de que las drogas que se venden en sus calles (desde el cannabis a la cocaína) llevan también una importante cantidad de insecticida. Pero, ¿por qué? Según parece, esto incrementaría el potencial alucinógeno de dichas sustancias.
Los insecticidas se basan en los llamados piretroides, unas moléculas que imitan la estructura dela piretrinas, que son producidas de forma natural por las plantas para matar a los insectos,afectando a su sistema nervioso. Lo que hacen es modificar los canales de sodio del tejido nervioso hasta destruirlos, provocando la parálisis y la muerte del insecto.
Por supuesto, los piretroides están diseñados para matar insectos, no humanos. Pero una dosis, aunque no nos cause la muerte,si afecta al sistema nervioso provocando una reacción que ha sido descrita como un «subidón repentino», que puede durar hasta casi una hora.
Para matar a una persona, la dosis de piretroides tendría que ser altísima. Pero los especialistas están preocupados pro los efectos que pueda causar en el sistema nervioso el uso prolongado de estas sustancias.
Fuente: LiveScience.
Vicente Fernández López