Si te has fijado en el cartel que anuncia la exposición, el gancho es perfecto: don Quijote y Sancho Panza a lomos de dos dinosaurios [hay MÁS FOTOS abajo]. El símbolo español sirve de reclamo para un tema que a los japoneses les vuelve loco, como son estos animales extinguidos hace 65 millones de años. «Allí son un poco dinomaníacos«, cuenta a QUO el paleobiólogo Francisco Ortega, uno de los organizadores de la exposición.
Junto con José Luis Sanz (miembro de nuestra Selección Española de Ciencia), Ortega descubrió en 2003 el dinosaurio carnívoro Concavenator corcovatus (apodado Pepito) en el yacimiento de Las Hoyas (Cuenca). Junto con otro yacimiento, el de Lo Hueco, la ciencia considera que la importancia de los especímenes hallados en la zona los hacen merecedores de la etiqueta de «Atapuerca de los dinosaurios».
La pregunta que primero viene a la cabeza es por qué Japón y por qué ahora. Y la respuesta es doblemente chocante y a la vez interesante. Por un lado, el Concavenator de Cuenca guarda similitudes con el carnívoro Fukuiraptor, encontrado en Fukui (sede de la exposición). «Allí se han descrito también formas de dinosaurios herbívoros, llamados Fukuititan, que resultan ser parientes relativamente cercanos de los dinosaurios titanosaurios de Lo Hueco», comenta Ortega.
El segundo motivo es histórico: en 2014 se celebra el Año Dual España-Japón, ya que ahora se cumplen 400 años desde que Japón instalara su primera embajada en España, concretamente en Sevilla.
La muestra no se ceñirá a los restos que estos mismos días están siendo ya embalados para enviarlos a Japón, sino que incluiría modelos a tamaño natural, recreaciones robóticas que pasearán por las salas y material en 3D. Está previsto que se inaugure el 11 de julio y que se prolongue hasta el 13 de octubre.