El físico Juan Collar de la Universidad de Chicago intentará desenmascarar este mes la identidad secreta de la materia oscura, casi el 90% de toda la materia en el universo. Aunque es invisible, los científicos detectan la influencia gravitacional que ejerce en las galaxias.
El proyecto se basa en desplegar cámaras con un líquido: iodotrifluorometano (CF3I). Una de ellas, la primera de 4 kilos y la siguiente (a fin de año) de 60 kilos. Las explosiones se realizarán en el Observatorio de Neutrinos de Sudbury, o SNOLab, en Canadá. De acuerdo con los científicos que participan del proyecto, partículas de materia oscura dejarán un rastro de burbujas cuando pasen a través del líquido en las cámaras.
Uno de los candidatos más firmes para formar la materia oscura lo constituyen las partículas masivas débilmente interactivas (WIMP por sus siglas en inglés), las cuales, de acuerdo con Collar “serían la explicación perfecta para todas las evidencias que tenemos de la materia oscura”.
Este tipo de pruebas se realizan bajo tierra ya que en la superficie se detectan señales falsas debido a distintos tipos de radiación natural, mientras que a cientos de metros bajo tierra, la roca no tiene ningún impacto en las partículas masivas débilmente interactivas.
Para Collar el “SNOLab es un sitio muy especial. La estructura construida aquí es sorprendente. Apenas entras te debes duchar para quitarte cualquier rastro de polvo. Es una atmósfera perfectamente limpia. Y esa es una de nuestras mayor preocupaciones a la hora de realizar este tipo de experimentos, que haya algún tipo de contaminación en la muestra”.
Juan Scaliter