La personalidad peculiar de su presentador y director hizo que hasta un grupo de música adoptase jocosamente el nombre de Los Punsetes. El apellido de Eduard Punset, director del programa Redes, de TVE, se ha convertido en estos 18 años de emisión en sinónimo de divulgación científica. Junto con Tres14 (también desaparecido) eran los únicos programas dedicados a la ciencia en toda la parrilla de televisión en España (ambos eran de TVE).

Ahora que la cadena ha decidido terminar con su trayectoria «por falta de acuerdo económico» (aunque adelanta que buscará otros formatos con el divulgador al frente), el mundo de divulgación reflexiona para Quo sobre el programa, y piensa en alternativas. José Cervera, periodista y biólogo, se muestra «más partidario de contar la ciencia de las noticias que las noticias de ciencia». El también profesor universitario cree que «más que hablar de los avances e investigaciones que se van conociendo, sería mucho más divulgativo explicar la actualidad desde un punto de vista científico» porque todo tiene una vertiente biológica, o geológica (el caso del Proyecto Castor de Tarragona) o evolutiva cuando se trata de incidentes humanos, por ejemplo.

«Soy más partidario de contar la ciencia de las noticias que las noticias de ciencia»

En todo caso, Cervera apostaría por una temática más amplia que la de Redes: «El programa estaba muy escorado hacia los intereses de su presentador, que eran sobre todo cosas relacionadas con las neurociencias y el comportamiento… y también algunas cosas de física cuántica», pero, según él, «dejaba muchas otras materias de lado». Aunque reconoce que en el espacio se ha entrevistado «a científicos muy interesantes».

Para Antonio Calvo Roy, presidente de la Asociación Española de Comunicación Científica, la noticia del cierre no es buena: «Dado que la presencia de la ciencia y de la divulgación de la ciencia es muy escasa en la televisión, siempre es una pena que desaparezca un programa dedicado a ello». Pero coincide con Cervera en que «el excesivo protagonismo del presentador, por otra parte, creo que ha jugado en contra del programa».

Para el también periodista los temas que se trataban tampoco cumplían con la variedad de la que hablaba Cervera: «Había un cierto sesgo en los temas y un tratamiento que no siempre era el adecuado, no ya para la divulgación sino para la ciencia. Algunas derivas del programa estaban francamente lejos de la ciencia y muy adentradas en la charlatanería y eso quizá haya despistado al público».

Acabó siendo «un producto repetitivo y que en el fondo resulta poco más que promoción de un sello familiar»

¿Y cómo sería el programa adecuado para Calvo Roy? Nos da una idea general (y un halago): «Pues atractivo, divertido, riguroso pero lejos del rigor mortis. Con mucha imaginación, con espacio para reflexión, la sorpresa y contando qué es, cómo funciona, para qué sirve la ciencia. Hay suficientes productos exitosos en el mundo de la comunicación científica, y Quo es de uno de ellos, como para tener ejemplos para poner esa manera de las hacer las cosas en televisión».

Si trasladamos las mismas cuestiones a Javier Armentia, astrofísico, director del Planetario de Pamplonay colaborador en varios medios de comunicación, sus apreciaciones han ido cambiando: «Hace unos años, cuando se amagó con quitar de un plumazo Redes fui uno de los primeros que me levanté ‘en armas’ para pedir que RTVE mantuviera ese programa».

Esto pasó a comienzos de 2011, pero Armentia ahora ya no lo haría: «Lo que fue un buen panorama de actualidad científica, donde grandes científicos podían dar a conocer las nuevas tendencias de la investigación se ha ido convirtiendo en un producto repetitivo y que en el fondo resulta poco más que promoción de un sello familiar y de libros de autoayuda», nos cuenta por correo electrónico. Pero cree que ése no ha sido el motivo por el que TVE prescinde del programa.

Para él, una buena idea sería rescatar formatos «como Tres14, una verdadera apuesta por la comunicación de la ciencia». Aún así, «mientras no sea sustituido por un contenido de calidad sobre ciencia, será una mala noticia», añade Armentia.

Redacción QUO