El estudio del reconocido arquitecto Norman Foster está trabajando junto a la Agencia Espacial Europea (ESA) para diseñar una serie de bases lunares con capacidad para cuatro personas y que sea capaz de resistir condiciones como temperaturas extremas, meteoritos y radiación.
El proyecto, realizado en colaboración con la Universidad de Ingeniería Scuola Superiore Sant’Anna (Italia), Monolite UK (Reino Unido) y la Alta SpA (ingeniería aeroespacial italiana), ya ha realizado los primeros modelos. Los arquitectos han construido una estructura en forma de cúpula de 1,5 toneladas, con una espuma específicamente diseñada. Esta actúa de marco para que la impresora 3D rellene los huecos con polvo lunar (regolito). También se probaron modelos más pequeños en cámaras de vacío.

[image id=»72770″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]

“Estamos acostumbrados a crear diseños para climas extremos utilizando los recursos de la naturaleza y materiales sostenibles – explica Xavier De Kestelier, uno de los miembros del equipo de Foster –. El proyecto de hábitat lunar sigue la misma lógica. El proceso ha resultado fascinante y al mismo tiempo desafiante en cuanto se trataba de un material hasta ahora inexplorado para nosotros”.
Aunque sin fecha por ahora, el objetivo es levantar estos nuevos hogares en el Polo Sur selenita, una región con el Sol siempre a la vista.

Juan Scaliter