Dos días atrás, el astronauta Scott Kelly subía una fotografía de una flor naranja a su cuenta de Twitter asegurando: “La primer flor que ha crecido en el espacio hace su debut. #SpaceFlower #zinnia #YearSpace”. Obviamente la imagen y el tweet se hicieron virales en minutos con 32.000 retweets y más de 40.000 likes hasta el momento. Pero…de verdad se trata de la primera flor que ha crecido en el espacio ?
Juzgad vosotros mismos. En 2012 el también astronauta Don Pettit hizo algo similar con un calabacín, un brócoli y…un girasol. La Nasa aún no ha dicho nada para resolver esto, pero más atrás en el tiempo, hay otras referencias a flores en el espacio.

[image id=»76476″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]

En 1998 el gigante de la industria del perfume IFF (International Flavors and Fragances, Fragancias y Sabores Internacionales) envió una pequeña rosa conocida como Esencia Noctura en órbita a bordo del transbordador Discovery. Allí a cientos de kilómetros de su hábitat natural, ocurrió algo inesperado…aunque evidentemente buscado. Tomiyuki Namba, director de investigación de perfumería de los laboratorios Shiseido, una de las firmas responsables del experimento, explica qué ocurrió: “El transbordador es muy pequeño, así que las rosas tenían que ir bien acondicionadas pero sin ocupar demasiado espacio. ¿El lugar idóneo? Una cámara sellada llamada Astroculture, patentada por IFF”. La Astroculture estaba preparada con la temperatura y la humedad adecuadas para las rosas y también les proporcionaba los nutrientes necesarios durante los 10 días que duraba el viaje. 
“Las rosas enviadas al espacio – agrega Namba- eran todavía capullos a fin de que florecieran durante el viaje. Cuando esto ocurrió, se extrajo la fragancia mediante una jeringuilla llamada SPME. Básicamente se trata de un hilo de fibra de silicona impregnado de un líquido especial que, por decirlo de algún modo, absorbe el aire generado alrededor de la flor”. Cuando concluyó el viaje se testó la fragancia y los expertos de la IFF detectaron un olor fresco y muy intenso, totalmente diferente al que la rosa produce cuando florece en la Tierra. El experimento demostró que la microgravedad causa un cambio en la composición química de la fragancia…pero no se sabe, aúncómo exactamente influye la gravedad. La esencia obtenida con este método forma parte del perfume Zen, de Sisheido.

Juan Scaliter