En Cataluña, donde actualmente se encuenta la llamada Plana de Vic, hubo un mar tropical. Por supuesto, fue hace muchísimo tiempo, durante el período geológico conocido como Eoceno. Y fue en aquella etapa cuando en dicho lugar vivió una especie de animal parecida a la vaca marina, y que actualmente está extinta. Sus restos han sido encontrados por investigadores del Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusfont (ICP), que han bautizado a esta variedad de sirenio con el nombre de Prototherium ausetanum, en homenaje a los ausetanos un antigo pueblo íbero.
Los investigadores han recuperado el cráneo y varias costillas y vértebras de este animal. Unos restos cuya antiguedad se ha calculado en unos 40 millones de años. Curiosamente, fusionado con ellos, los investigadores también han encontrado el fósil de una especie de esponja marina que habitualmente vivía en profundidades superiores a los 100 metros. Lo que sugiere que, una vez muerto, el cuerpo del animal se fue cubriendo lentamente con todo tipo de sedimentos.
«El estudio del cráneo reveló diferencias significativas respecto a las otras especies fósiles de sirenio que conocíamos del Eoceno medio», ha explicado Jordi Balaguer, uno de los investigadores que ha analizado los restos. Los dugongos actuales, unos grandes mamíferos del orden de los sirenios, de unos tres metros de largo y 300 kilos de peso (y que al igual que los manatíes pertenecen al orden de mamíferos conocidos genéricamente como vacas marinas), son los parientes vivos más cercanos que quedan de esta especie.
Redacción QUO