La Ii Guerra Mundial duró seis años. Casi nada comparada con la Guerra de los Cien Años, que casi se extendió durante un siglo. Pero, ¿cuál ha sido el conflicto más corto de todos los tiempos? El que enfrentó a Inglaterra con el sultán de Zanzíbar. Una guerra que solo duró (según las distintas fuentes) entre 38 y 40 minutos.

En 1896, Zanzíbar gozaba de una aparente independencia gobernada por un sultán, aunque en realidad estaba bajo la «protección» del Reino Unido, que en la práctica manejaba la pequeña nación. El 25 de agosto falleció el sultán reinante, Hamad ibn Thuwaini, quien aceptaba la tutela inglesa. Pero, el nuevo gobernante, Khalid ibn Barghash, se autoproclamó su sucesor sin contar con la autorización de los británicos, que exigieron su renuncia

Khalid hizo caso omiso a la advertencia de la potencia colonial, lo que provocó que los británicos (en un claro gesto imperialista) enviasen dos buques de guerra y 150 infantes de marina para reconquistar la isla. El ataque comenzó a las nueve de la mañana del 27 de agosto y, a las 9,40 h, ya se había izado la bandera blanca en el palacio del sultán. En el intervalo entre esos dos instantes, hubo un intenso cañoneo en el que los ingleses hundieron toda la flota de Zanzíbar (que tampoco es que fuera la VI Flota americana) y destruyeron las escasas defensas de la isla.

Redacción QUO