Gracias a las imágenes obtenidas por el observatorio Very Large Array ( o VLA por sus siglas en inglés, un conjunto de 27 radiotelescopio), científicos de Estados Unidos, Alemania, Holanda, Corea del Sur y Chile han logrado detectar la presencia de hidrógeno en una galaxia, con el encantador nombre de J100054.83+023126.2, a 5.000 millones de años luz de distancia. Anteriormente se había detectado hidrógeno a una distancia máxima de 3.000 millones de años luz.
“Gracias a las mejoras en el VLA – explica Ximena Fernández, líder del estudio publicado en Astrophysical Journals– es la primera vez que hemos logrado medir hidrógeno atómico en una galaxia tan lejana. La señal podría haber comenzado aún antes que nuestro planeta existiera y tras tanto tiempo de viaje, llega a nuestro telescopio”.
Del mismo modo que los arqueólogos excavan con cuidado y paciencia hacia el pasado, los astrónomos también bucean en la inmensidad a la caza de lo que ocurrió en tiempos remotos. El proyecto es parte del Gran Estudio Extragaláctico del COSMOS o Estudio CHILE, por sus siglas en inglés (COSMOS HI Large Extragalactic Survey) que rastreará más de mil horas de información obtenida por el VLA, yendo cada vez más lejos en el cosmos y más atrás en el tiempo.
“Ese es precisamente el objetivo del proyecto – concluye Fernández –, estudiar cómo han cambiado las galaxias a lo largo del tiempo. Una pregunta que esperamos responder es si en el pasado las galaxias tenían mayor cantidad de gas transformándose en estrellas que ahora”.

Juan Scaliter