Desde hace unos años se dice que si el monstruo del Lago Ness realmente hubiera existido, podría haberse parecido mucho al Dinocephalosaurus, una nueva variedad de reptil prehistórico cuyos primeros restos fueron descubiertos en China en 2002.

Se trata de una criatura marina que vivió hace aproximadamente 240 millones de años, y que se alimentaba de los peces que se introducían en su boca al absorber agua.

Pero lo que acaba de sorprender a los biólogos es que, aunque siempre habían creído que los miembros de esta especie ponían huevos, resulta que no era así.

Un equipo de arqueólogos chinos acaba de descubrir el fósil de una hembra que tenía en su interior el embrión de una cría. La ausencia de restos de cáscaras en su organismo, descarta la posibilidad de que el animal se hubiera comido algún huevo ajeno.

El hallazgo revela que este reptil, que pertenecía al mismo grupo que las aves y los cocodrilos actuales, se reproducía como si fuera un mamífero.

Fuente: LiveScience.

Vicente Fernández López