En el años 2012, un estudio publicado en The Lancet señalaba la importancia del uso de la técnica de tomografía computarizada mínimamente invasiva (PMCTA) para determinar causas de muerte natural,. El inconveniente es que tenía una debilidad importante: era incapaz de diagnosticar enfermedades coronarias, la causa más común de muerte natural.
Ahora un grupo de expertos de la Universidad de Leicester liderados por Guy Rutty, ha dado un paso más allá. En un estudio publicado también en The Lancet, los expertos aplicaron la técnicaPMCTA a 240 cadáveres. Los resultados sugieren que PMCTA podría utilizarse para identificar la causa de muerte en hasta 92% de las investigaciones sin usar una autopsia invasiva. Su implementación, en lugar de la autopsia como prueba estándar de primera línea para la muerte natural inesperada, podría tener un efecto positivo y profundo en grupos públicos y religiosos dentro del Reino Unido y potencialmente más allá
«Esperamos que nuestros resultados – señalan los autores en el estudio – tengan una gran influencia en el futuro de la práctica de la autopsia en el Reino Unido y en todo el mundo. Durante años se han realizado varios intentos de desarrollar enfoques alternativos a la autopsia invasiva para limitar la extensión de la disección del cadáver. En la tomografía computarizada, se inyecta un agente de contraste en una vena y la circulación lo envía alrededor del cuerpo, lo que permite estudiar el estado de los vasos sanguíneos en cualquier parte del cuerpo. En los cadáveres está técnica no puede ser utilizada”. Para resolver esto, los científicos de la Universidad de Leicester han desarrollo de una nueva técnica de angiografía coronaria que sí funciona en cadáveres.
“Básicamente – concluye Rutty en un comunicado – se utiliza una combinación de agente de contraste estándar (positivo) y aire (negativo) para mostrar las arterias coronarias y las cavidades ventriculares. Tanto la autopsia como la PMCTA tienen diferentes puntos fuertes y débiles como enfoques de investigación. La última es superior en la identificación de traumas y hemorragias, mientras que la autopsia resultó mejor en la identificación de tromboembolismo pulmonar. A medida que avancen las técnicas, la PMCTA podrá convertirse en un estándar”.
Juan Scaliter