España es líder en tratamientos de fertilización asistida a nivel europeo, pero las técnicas mejoran cada día y un nuevo avance podría dar un importante salto cualitativo en este ámbito, ya que el conocimiento avanzado sobre la salud de los embriones podría ayudar a los médicos a seleccionar aquellos que tienen más probabilidades de llevar a embarazos exitosos.
Investigadores de la Universidad de Illinois, liderados por Gabriel Popescu y Matthew Wheeler , han desarrollado una técnica capaz de producir imágenes tridimensionales de embriones vivos que podrían ayudar a determinar la viabilidad del embrión antes de la fertilización in vitro en humanos. Por ahora la técnica se ha probado en ganado vacuno, pero pronto se espera su uso en humanos.
El nuevo método, publicado en la revista Nature Communications, denominado microscopía de interferencia de luz gradiente (GLIM por sus siglas en inglés), resuelve un reto que otros métodos no han podido: producir imágenes de muestras gruesas y multicelulares.
En muchas formas de microscopía biomédica tradicional, para producir una imagen, la luz se proyecta a través de fragmentos muy finos de tejido. Otros métodos utilizan marcadores químicos o físicos que permiten identificar un objeto específico, pero esos marcadores pueden ser tóxicos para el tejido vivo.
«Al mirar muestras con otros métodos – explica Popescu en un comunicado –, la imagen se debilita debido a que la luz rebota por todas las superficies de la muestra. Es como mirar en una nube”.
GLIM, en cambio, es capaz de profundizar en las muestras controlando la longitud de la trayectoria sobre la cual la luz viaja a través de la muestra. La técnica permite a los investigadores producir imágenes de múltiples profundidades que luego se unen para producir una única imagen tridimensional.
Juan Scaliter