Según informa la agencia de noticias AP, un grupo de investigadores alemanes ha detectado un pico de radiación en Europa central y occidental.
Según aseguran, el pico se debe a altos niveles de Rutenio-106, un radioisótopo que sirve como forma de energía para satélites y que se emplea de forma habitual para tratar tumores cancerosos.
Los niveles anormales, los cuales se vienen detectando desde finales de septiembre, no se sabe de dónde proceden o a qué pueden corresponder. Por fortuna, no supone un riesgo para nosotros.
Redacción QUO