Sergio Canavero es un polémico neurocientífico italiano que sostiene que realizar un trasplante de cabeza ya es técnicamente posible. De hecho, en noviembre de 2017 anunció que ya había realizado con éxito en China la primera intervención de este tipo, aunque al parecer tan solo se limitó a trasplantar la cabeza de un cadáver a otro cuerpo sin vida.
Lo cierto es que la comunidad científica es bastante escéptica respecto a que sea posible realizar una operación de este calibre. Y, ahora, un equipo de investigadores ha publicado en Current Translational reports, un estudio titulado: «¿Estamos preparados para realizar un trasplante de cabeza?». Y la respuesta parecer ser que es… no.
Tal y como explican los autores del informe, los posibles efectos secundarios d euna intervención semejante (si se llevase realmente a cabo) serían de una magnitud inconcebible. El primer problema al que se enfrenta un trasplante de cualquier tipo es al posible rechazo por parte del cuerpo receptor. Por eso, un trasplante de cabeza (suponiendo que pudiera realizarse con éxito) desencadenaría una respuesta inmune de magnitudes inconcebibles en el organismo receptor.
Además, tal y como explican los investigadores, la consciencia no es algo que se origine únicamente en el cerebro, sino que es un proceso en el que también está involucrado el sistema nervioso. Por ese motivo, se generaría una disonancia tan enorme entre el cerebro de la cabeza trasplantada y los nervios del cuerpo receptor, que podrían desencadenar un proceso de demencia, o provocar un rechazo que causase la muerte de la persona.
Fuente. IFL Science.
Vicente Fernández López