La parrilla en el frontal de los coches tiene como función dejar pasar el aire para refrigerar el motor de combustión. Pero, ¿qué pasa cuando se trata de un vehículo eléctrico como el Jeep Avenger?
La imagen de Jeep está casi más en su parrilla de siete ranuras que en su logotipo. Así viene siendo desde los años 40. «Es nuestro corazón y nuestra alma», dice Christian Meunier, CEO de la marca y no nos la vamos a jugar renunciando a una de nuestras señas de identidad».
El Jeep Avenger, el primer eléctrico de la marca, se las ingenia para mantener la icónica parrilla de siete barras
Y no lo han hecho. El Jeep Avenger, que se venderá a partir de primeros de año y que ya admite pedidos, mantiene la parrilla típica de la casa reforzada por iluminación LED. «En una cuestión de ADN «, según Meunier o, como dice Ralph Gilles, jefe de diseño de Stellantis, grupo automovilístico al que pertenece Jeep, «su misión es emocionar y que cuando veas un Avenger a 50 metros de distancia, digas: ‘Ah, eso que viene es un Jeep'».
Pero Jeep no comenzó su historia con esta parrilla. El precursor de la marca, el Willys MB de 1942, tenía nueve ranuras de hierro. Era un vehículo militar. Se fabricó por encargo del ejército de los Estados Unidos para que las tropas pudieran moverse con facilidad durante la Segunda Guerra Mundial. Las siete ranuras llegaron cuando se fabricó la versión civil de este modelo. ¿La explicación? Era necesario ganar espacio para acomodar unos faros más grandes de esta versión.
Cuando la marca empezó a estudiar el lanzamiento de su primer modelo eléctrico, el Jeep Avenger, se cuestionaron si no sería el momento de romper moldes y apostar por algo nuevo. La idea duró exactamente lo que los responsables de Jeep tardaron en visualizar la parrilla de siete ranuras y su potencial. Desecharon su idea inicial y apostaron por mantener la imagen que hasta ahora les ha funcionado. El Jeep Avenger cien por cien eléctrico es una muestra de ello.
Más sentido del que parece
Pero puede que el Jeep Avenger sí necesite la tradicional parrilla de refrigeración en algunos casos. La escasa infraestructura energética en Italia y España ha determinado que el Avenger se comercialice en estos países con versión microhíbrida de gasolina que sí necesitará refrigeración.
Serán una rara avis dentro del plan de lanzamientos total del Jeep Avenger, un SUV compacto de cuatro metros de longitud que, excepto en estos dos países, se venderá únicamente como vehículo 100% eléctrico.
El Jeep Avenger tiene una autonomía de 400 km en carretera y puede llegar a los 550 km en tramos urbanos
Configurado inicialmente como un tracción delantera hace sin embargo guiños a la conducción fuera del asfalto. Su altura libre al suelo es de 20 cm (18,6 en el Jeep Renegade), los ángulos de ataque y ventral son de 20º y el de salida de 32º, cifras imposibles en cualquier turismo. También ofrece comportamiento a la carta. El conductor puede elegir entre seis modos: “Normal” para el día a día, “Eco” para mejorar la autonomía, “Sport” para una conducción deportiva, “Snow” para cuando se necesita mucha tracción en carreteras o caminos helados, “Mud” si hay barro, y “Sand” para circular sobre arena.
¿Tiene sentido un SUV eléctrico para circular fuera del asfalto?
Cero emisiones. Esta es la seña de identidad del nuevo Jeep Avenger 100% eléctrico. Es absolutamente compatible con la naturaleza gracias a una batería de 54 kWh de capacidad compuesta por 10 módulos de celdas debajo de los asientos traseros y siete módulos debajo de los delanteros.
El motor eléctrico del Jeep Avenger produce 154 CV tiene una autonomía de 400 km que puede llegar a 550 km en tramos urbanos más lentos en los que se producen paradas y arranques que optimizan la autorrecarga de las baterías mientras se circula.
Pero lo mejor es que Jeep, aún en esta versión tan alejada de aquel Willys del 45, mantiene toda su esencia, la que ha llevado a ser probablemente la marca más emocionante del mercado… incluida su parrilla de siete ranuras.
«Es absolutamente compatible con la naturaleza». Sois unos mamarrachos.