Gracias a un reciente estudio realizada a gran escala en la Cuenca del Amazonas, investigadores del Instituto de Tecnología de Melbourne han sabido que si bien la Amazonía central y oriental estaban poblados de asentamientos humanos mucho antes de la llegada de Cristóbal Colón, zonas como la región occidental de la cuenca, eran más escasas en población, siendo ocupadas por grupos de personas de forma intermitente a consecuencia de las migraciones.

Según parece, la Cuenca Amazónica occidental se encontraba ocupada principalmente por poblaciones minoritarias de humanos que migraban hacia otros destinos antes de que el descubridor español llegara a suelo sudamericano. Estos nuevos datos aportados por los investigadores de Melbourne, podría ayudar a los investigadores a entender cómo antaño los asentamientos que existieron en el Amazonas pudieron influenciar la selva tropical y viceversa.

Para el desarrollo del estudio, Crystal McMichael, investigador principal del estudio, analizó con su equipo el suelo de 55 lugares distintos a lo largo y ancho de la Cuenca del Amazonas. En su aventura, trataban de encontrar fitolitos, depósitos de sílice y capas de carbón vegetal, muestras de vida y agricultura antigua. La evidencia de fuego fue mínima, así como las señales en los acantilados del río, densamente ocupados en la antiguedad, pero que en la actualidad muestran una escena apenas perturbada en la parte occidental de la Cuenca.

En las excavaciones en la zona de la Amazonia oriental, «tampoco se encontraron herramientas de piedra o cerámica», según declaran los investigadores del estudio para la revista Science.

Redacción QUO