Desde microbios a ballenas. Cuartos secretos con diamantes y oro. Originales únicos, como la primera edición de El origen de las especies. Todo esto, que haría las delicias de cualquier museo, se encuentra en los depósitos del de Historia Natural de Londres. Y hay más. Porque, si bien la mayoría de las instituciones tiene entre sus paredes tesoros que no muestran al público, aquí hay unos 12.000 especímenes únicos en el mundo. Uno de los ejemplos es una colección de centenares de colibríes con plumas brillantes como joyas. También se puede ver una ballena azul, y hasta lo que sería el sueño de cualquier expedicionario por África: antílopes, búfalos, elefantes y mandriles. Debido a que muchos especímenes no pueden ser disecados y conservados adecuadamente, son enviados al Centro Darwin, una construcción contigua a la del museo. Solo la colección de peces de este edificio abarca varios pisos de envases de cristal donde tiburones, peces luna y monstruos de las profundidades marinas miran fijos al visitante. Desafortunadamente, estos no son muchos, pues para recorrer estas galerías secretas se requiere un permiso especial. O abrir un nuevo museo. Hasta que eso ocurra, te dejamos espiar algunos de sus secretos.

Redacción QUO