El uso del carbón como combustible parece algo obsoleto. Sin embargo, en la actualidad sigue siendo una fuente de energía básica en todo el mundo. Y es más, en los próximos años podría incluso llegar a utilizarse en mayor medida. Por un lado, las estimaciones señalan que quedan cerca de 40 años de petróleo “barato” y 60 años de gas natural, mientras que podría haber todavía 200 años de reservas de carbón.

Por otro lado, diversas empresas y grupos de investigación llevan años trabajando en lo que han denominado “tecnologías limpias de carbón”. Su objetivo: producir energía de forma económica reduciendo el impacto ambiental de este material.

En este sentido, el debate se ha reabierto entre los que siguen pensando que es un sistema muy contaminante de lograr energía, y los que defienden estas nuevas tecnologías. En Estados Unidos (EEUU) el tema está dando cada vez más juego, hasta el punto que durante la campaña electoral, Barack Obama tocó el tema, afirmando que le gustaría encontrar una forma de utilizar el carbón de forma “limpia”.

Y no es para menos: EEUU posee las principales reservas del planeta (el 30% del total), y es, después de China, el principal productor mundial. Sin embargo, cada vez más personas y asociaciones en este país no quieren seguir aprovechando este recurso porque lo consideran perjudicial para el medio ambiente y la salud de los ciudadanos. En este movimiento hay caras conocidas, como por ejemplo los hermanos Coen, que han creado un video en el que satirizan la presunta “limpieza” de estas nuevas tecnologías.

Redacción QUO