Los lémures son actualmente una especie endémica de Madagascar, pero el origen de la misma se encuentra en el África continental. ¿Cómo pudieron entonces llegar hasta la isla si no saben nadar? Hasta la fecha, se creía que pudieron hacerlo agarrados a troncos o ramas de árboles mientras eran arrastrados por alguna tormenta. Pero, ahora, acaba de descubrirse la verdad. Y todo gracias a un fósil encontrado en la década de 1960.
Inicialmente, se pensó que el fósil bautizado como Propotto leakeyi, era una extraña variedad de murciélago. Pero un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Duke ha descubierto que se trataba de un primate, y concretamente de un ancestro del aye-aye, una de las muchas ramas de los lémures.
Siempre se ha creído que los lémures se dividieron en diversas ramas una vez que ya estaban en Madagascar, pero el nuevo estudio sugiere que lo hicieron mientras aún habitaban en el continente. Pero, ¿cómo llegaron a la isla? Los investigadores creen que lo hicieron en tiempos más recientes. Concretamente durante el Mioceno, cuando el nivel del mar era muy bajo.
Fuente. SINC.
Vicente Fernández López