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Esta fotografía sugiere las expectativas y esperanzas de la Hu­ma­nidad ante lo que nos queda por co­nocer en el globo terráqueo, para provecho y beneficio de nuestra especie. Insisto en mis teorías geocos­moís­tas, cristalizadas en Cos­moísmo y Geoísmo, y Estrategias para la Tierra y el Espacio: Geoísmo y Cosmoísmo.

Últimamente, trato de impulsar el mejor conocimiento de los espacios subacuáticos y subterráneos de la Tierra. El descubrimiento de nuevos seres, elementos físico-químicos, energías, fuerzas y tantas cosas más, podrá satisfacer a la población humana, en progresivo aumento, sin tener que recurrir a automutilaciones, y mucho menos al aborto o la eutanasia. Esto podrá contrarrestar nuestro crecimiento, como los ilusionantes y posibles asentamientos cósmicos que empiezan a ser imaginables en el recién estrenado III Milenio.

Redacción QUO