En España cerca de 100.000 personas sufren de heridas crónicas y más aún son las que padecen afecciones permanentes en la piel causadas por la diabetes o la postración obligatoria en una cama. Un nuevo modelo matemático podría ayudar a los médicos a acelerar la cura de irritaciones dérmicas, úlceras diabéticas y otros tipos de heridas crónicas.

A menudo estas heridas permanecen abiertas debido a la poca afluencia de sangre con suficiente cantidad de oxígeno ( y otros factores curativos) a la zona. Avner Friedman, profesor del Instituto de Biociencias Matemáticas de la Universidad Estatal de Ohio y coautor de la investigación asegura que este modelo es el primero en predecir cómo será la cura de estas heridas.

Friedman primero trazó un modelo de una herida normal en la piel. Su equipo desarrolló ecuaciones que representaran el tejido elástico cercano a la herida. Otra ecuación servía para predecir cuándo y cómo los factores curativos entrarían a la zona. Así al descifrar la cantidad de oxígeno cercano a la herida, los investigadores podrían predecir la cura de heridas.

Este modelo permitirá a los médicos anticipar tratamientos y determinar cuál de ellos será el más efectivo de acuerdo al tipo de herida y las necesidades de cada paciente.

Juan Scaliter