Una de las primeras necesidades en catástrofes naturales, como el reciente terremoto de Haití, es el agua potable. Pero la desalinización es cara y precisa de grandes cantidades de energía eléctrica, algo con lo que no se puede contar en un escenario como un terremoto, huracán o un tsunami.
Afortunadamente científicos del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) han desarrollado un pequeño dispositivo que trasforma el agua de mar en agua potable. La investigación, a cargo de los profesores Sung Jae Kim y Jongyoon Han, ambos del Departamento de Ingeniería Electrónica y Ciencias de la Computación, junto a colegas coreanos, ha sido publicada en la revista Nature Nanotechnology.
El dispositivo se basa en un fenómeno conocido como «polarización por concentración de iones»: básicamente se le extraen los iones al agua de mar que una vez desprovista de estos, se convierte en potable. El sistema separa por electroestática no solo la sal sino también virus y bacterias presentes en el líquido.
La prueba que confirmó esto fue llevada a cabo con agua de mar contaminada con partículas de plástico y sangre humana. El dispositivo removió el 99% de la sal y de los agentes contaminantes.
La ventaja de esta «depuradora» es que puede ser cargada con energía solar y, por su tamaño, transportada y utilizada por una sola persona. Los científicos reconocen que aún faltan dos años para que salga al mercado, pero cuando lo hagan, su uso será suficiente para dar agua a toda una familia ya que unas 1.600 unidades serían capaces de potabilizar 15 litros de agua por hora.

Juan Scaliter