El mundo de la divulgación científica y el escepticismo a la pseudociencia está de luto. A sus 95 años, el escritor y filósofo de la ciencia estadounidense Martin Gardner (Tulsa, Oklahoma, 1914) nos ha dejado.
Las matemáticas dejaron de ser aburridas gracias a su columna mensual “Juegos matemáticos” en la revista Scientific American, nada menos que entre 1956 y 1986. Varias recopilaciones de estos artículos se publicaron en formato libro, algunos de ellos traducidos al español, como Nuevos pasatiempos matemáticos o Viajes por el tiempo y otras perplejidades matemáticas. También publicó varios libros como ¡Ajá! Paradojas que hacen pensar o Máquinas y diagramas lógicos.
Y si la divulgación le debe mucho a Gardner, no lo es menos el escepticismo racional. Gardner fundó en 1976 el Comité para la Investigación Escéptica (CSI) junto con sus amigos y pioneros del escepticismo, como Paul Kurtz y James Randi.
Félix Ares, presidente de la asociación hermana del CSI, la Sociedad para el Avance del Pensamiento Crítico, señala que lo más importante de Gardner fue darse cuenta de que en Estados Unidos los charlatanes hablaban con total impunidad diciendo cosas absolutamente sin contrastar: que los extraterrestres nos visitaban, que la telepatía estaba demostrada, el creacionismo, la New Age… y nadie daba una contrarreplica, o éstas eran aisladas y débiles. Según Ares, “quisieron que esa impunidad se acabase, quisieron que además de la opinión de los crédulos también estuviera presente la opinión de los que pensaban de otra forma.”
A pesar de (o gracias a) su jubilación, Gardner siguió su prolífico trabajo literario y divulgador, y escribió también una columna en la revista The Skeptical Inquirer de la CSI, en la que no dio respiro a los fraudes y misterios paranormales. Sobre este tema también escribió varios libros, como La ciencia: lo bueno, lo malo y lo falso, La nueva era, o ¿Tenían ombligo Adán y Eva?
Además de sus publicaciones de divulgación y escepticismo, Gardner escribió sobre filosofía, una versión comentada de Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas (Alicia anotada), así como numerosas revisiones de libros de otros autores.
Redacción QUO