Los llamados Manuscritos del Mar Muerto son una colección de más de 900 pergaminos que fueron encontrados a mediados del siglo pasado en unas grutas de Qumrán, en Jordania. Están fechados en el período comprendido entre los años 250 adC y 66 dC, y constituyen el testimonio de texto bíblico más antiguo conocido.

El año pasado se abrió en Washington un museo creacionista dedicado a la Biblia. Y entre las supuestas reliquias que allí se exhiben se encuentran dieciséis fragmentos que pertenecerían a otros manuscritos de Qumrán hallados posteriormente.

Los responsables del museo enviaron dichos fragmentos al Federal Institute for Materials Research and Testing de Berlín, para que los estudiaran. Y los resultados de los análisis han revelado que, al menos cinco de ellos, son falsos. Y sobre el resto aún no tienen un veredicto claro, aunque todos los indicios resultan sospechosos.

Y es que tras la aparición de los auténticos manuscritos, surgieron también numerosos fraudes. Y se ve que cinco de ellos acabaron en el museo de Washington.

Fuente: LiveScience.

Vicente Fernández López