La nave más secreta de las fuerzas aéreas de Estados Unidos despegó anoche, y no se sabe cual será su misión ni cuando regresará a la Tierra. Se trata del X-37 B, un drone espacial no tripulado cuya existencia ha generado todo tipo de especulaciones. Hay quien afirma que se trata de un potente bombardero capaz de atacar la superficie terrestre desde el espacio, y quien cree que es un modelo especializado en destruir satélites enemigos.

La verdad es que poco se sabe a ciencia cierta de esta aeronave. Fue construída en 2004, y dos años después realizó su primer vuelo de prueba. Su aspecto recuerda al del transbordador espacial, aunque su tamaño es menor (tiene aproximadamente 8.8m de largo y 2,9 m de altura); tanto, que no tiene capacidad para llevar tripulantes. Además, tiene una envergadura de poco menos de 4,6 m y pesa 4,990kg. La nave despliega un panel solar en órbita para su alimentación eléctrica y permanece en el espacio mucho más tiempo de las dos semanas de vuelo que eran lo habitual con los antiguos modelos de la NASA.

El minitransbordador, fabricado por Boeing, vuela en órbitas muy bajas (entre los 200 y los 2.000 kilómetros sobre la superficie de la Tierra). A la hora de regresar, recibe las órdenes pertinentes para, automáticamente, reentrar en la atmósfera, descender y aterrizar en una pista, que en las tres misiones anteriores ha sido en la base de Vandenberg.

La primera misión del X-37B fue lanzada al espacio en abril de 2010 y aterrizó en la base de Vandenberg (California) en diciembre de aquel mismo año, tras siete meses en órbita. La segunda duró 15 meses (desde marzo de 2011 hasta junio de 2012). Para el tercer vuelo, se reutilizó la primera unidad del avión, que se lanzó en diciembre de 2012 y regresó en octubre de 2014, tras 675 días en el espacio. Los detalles concretos de estas misiones no han trascendido.

Como ya es habitual, la nueva misión de esta nave es un secreto, aunque las autoridades de la NASA han dado algunas pistas. Para llevarla a cabo se ha ensayado un nuevo sistema de propulsión, y se ha revelado que transportará un nuevo tipo de materiales (no se ha revelado cuales) para estudiar como se comportan en el espacio.

Redacción QUO